llegados a este punto ya no hay vuelta atrás...

Oh, que día más estupendo, que pena que se acabe ya.
Anoche tardé muchísimo en dormirme por culpa de los nervios que me producián mi encuentro con Sundae . Conseguí dormirme bastante tarde, pero cuando lo consegí fue tan profundo que casi me quedo dormida.
Poco después de las doce una limusina azul, preciosa, me recogío en casa. Dentro me esperaba C. R. mi chico sundae favorito, me temblaban las piernas mogollón y estaba super nerviosa, casi no articulaba palabra. Nos pusimos en camino hacia el ático de super lujo donde vive el cantante, Dustin, que iba super guapo.
La siguiente parada fue la casa rural donde Sundae crean y ensayan todas sus canciones. Allí me hicieron un pase ligero con algunas canciones mientras llegaba el tercer miembro del grupo Ralph que toca super bien la guitarra. Mientras llegaba el cuarto miembro J. Lance, C.R me dio algunas clases de batería y Dustín me enseñó las coreografías de la puesta en escena, que son super difíciles. Ralph es un poco más tímido y aun no se siente cómodo ante la presencia de fans.
A la hora de comer, la emisora de radio nos había preparado un cateríng bastante rústico, acorde con el entorno, pero exquisito.
Despúes de comer llegó J. Lance, que es el más rebelde de todos y el más juerguista y el que siempre se intenta escaquear, pero en el fondo es super dulce y atento.
Con el grupo al completo me hicieron un pase privado de todos sus hits y muchísimas canciones de su próximo disco. Hay mucho mas detalles que pertenecen a nuestra intimidad y que no puedo contar por aquí. Sólo os diré que son super campechanos y que la fama no se les ha subido a la cabeza para nada.
Ha sido un día perfecto, lástima que ha pasado demasiado rápido.